Amazon, gigante del comercio electrónico, ha dejado a todos perplejos con sus supermercados Go en los que no habrá cajas ni cajeros; todo se facturará a través de tu cuenta con ellos. El primero en abrir lo hará en Seattle, cerca de la sede de la compañía. De momento sólo está disponible para empleados de la empresa, pero espera abrirse al público a principios de 2017; es la sociedad robotizada a la vuelta de la esquina.
Un puñado de tecnologías como inteligencia artificial, aprendizaje automático y visión computerizada se usan para saberlo todo de ti: a qué hora llegas, cuánto tiempo estás en el interior, qué compras e incluso qué no, tras pasar varios minutos delante de una estantería o haber cogido algún producto y haberte arrepentido.
Los neoluditas han puesto el grito en el cielo porque miles de puestos de trabajo desaparecerán pero esta vez los tecnólogos tenemos más difícil usar el ejemplo de los coches (y adiós carruajes) o el de la máquina de vapor (hasta luego molinos), entre otros muchos. La Revolución Industrial y cualesquiera otras que podamos esgrimir están lejos de lo que se está avecinando.
Puedes desagregar esta ecuación maldita en otras variables como por ejemplo en que la revolución tecnológica y su productividad extrema ha reducido los costes marginales casi a cero. Que se lo digan a músicos, cineastas, escritores o medios de comunicación. Y las nuevas profesiones que aparecen no amortiguan los trabajos mecánicos que desaparecerán.
El fenómeno del coste marginal casi nulo ha impactado en los bienes de información. Share on X
Repensando qué queremos ser
Futuros como los planteados en el film distópico de ciencia ficción ‘Interstellar‘ (2014) cada vez parecen menos lejanos. En todo caso, y como siempre, el Homo Sapiens encontrará el camino. Esperemos que no a costa de la mayoría sino a favor de un mundo más igualitario aprovechando la tecnología ya que ésta, inevitablemente, abre la brecha entre ricos y pobres.
Sigamos adelante sin pausa pero reflexionando sobre la sociedad que queremos dejar en herencia a los que ya nos están jubilando.
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